Te entiendo perfectamente y no te sientas culpable si es así, para mí desde que era adolescente menstruar me parecía algo muy desagradable, me dolía, me limitaba para hacer planes, me sentía sucia…
Pero llega el momento de cambiar y aceptar que somos mujeres, cíclicas y menstruantes y seres sangrantes, y podemos tomar conciencia y ver la menstruación como nuestra gran amiga y aliada. Porque fluir con nuestra naturaleza cíclica tiene muchas ventajas: desde conocerte mejor a ti misma, reducir tus dolores, conocer exactamente tus días fértiles, hasta identificar las capacidades y habilidades de cada fase del ciclo para aprovecharlas y vivir en sintonía con ellas.
Conectar con nuestro útero y nuestro ciclo menstrual es conectar con una profunda fuente de sabiduría y fuerza interior como mujer.